¿Cómo recuperar la autoestima?

Imagen de Catherine McMahon
Imagen de Catherine McMahon

La autoestima fue el tema de la semana en Coaching para ti. Ese aspecto de nuestra personalidad que alerta ante las circunstancias adversas y la acción desconsiderada de terceras personas en su intento de vulnerar nuestros límites y decisiones.

En el programa anterior de enComunicacion hablamos de la importancia de establecer límites. En estos últimos días he escuchado varios comentarios sobre situaciones difíciles que atraviesan algunas personas en el ámbito laboral.

En todos los casos detecté un denominador común:  la valoración que tenían de sí mismas estaba siendo afectada y seriamente deteriorada por terceras personas, con el consecuente desánimo y pérdida de la ilusión que tenían por esa actividad o trabajo, además de malestar emocional y físico.

Por eso, es importante recuperar la autoestima, entendida como el valor que cada persona se otorga a sí misma según sean los pensamientos, sentimientos y experiencias sobre ella misma.

Este valor está muy ligado a la imagen propia que tenemos de nosotros mismos y a la aceptación de nuestras virtudes y defectos.

La “cotización” de este valor no se mantiene continua en el tiempo, sino que a veces fluctúa al alza o a la baja por condicionantes externos que afectan a la persona alterando a veces el concepto que tiene de sí misma.

Es importante conocer tres aspectos importantes que influyen en la autoestima:

  • los pensamientos, tanto los que impulsan como los que frenan o “intoxican” nuestra mente. No es lo mismo que nos digamos a nosotros mismos “soy capaz de hacerlo” que decirnos “es imposible, esto no lo puedo hacer”.
  • los valores que la persona tiene sobre quién es, qué habilidades y recursos tiene. Se trata de reflexionar sobre nuestros puntos fuertes y débiles, así como el entorno donde estamos.
  • las experiencias pasadas y presentes que le han conducido a la situación actual. Analizar qué ha sucedido o sucede en ese aspecto de nuestra vida o en otros que han afectado negativamente nuestra autoestima. Esto es muy importante. Es posible que nos encontremos con situaciones repetidas en donde cambian algunos personajes, pero el tema de fondo es el mismo.

Si notamos que estamos bajos de autoestima, ¿qué podemos hacer para recuperarla?

  • Saber cómo hemos llegado a ser lo que somos. Supone evaluarnos de la forma más objetiva posible sin fustigarnos, pero tampoco caer en la benevolencia. Tener en cuenta lo que hemos hecho y lo que hemos dejado de hacer para llegar a donde estamos ahora.
  • Identificar qué está alterando nuestra estabilidad emocional.
  • Tener la disposición total y absoluta de cambiar lo que nos perjudica, a pesar del esfuerzo, el dolor y otras posibles consecuencias
  • Invertir la forma de pensar. Cambiar el modo de pensar negativo a otro más positivo
  • No hacer generalizaciones sobre las malas experiencias que hayamos podido vivir, sino buscar respuestas sobre lo que hayamos aprendido.
  • Hacer una lista de los éxitos que hemos conseguido en todos los aspectos de nuestra vida
  • Evitar las comparaciones con los demás. Cada uno tiene su propio camino y forma de llevar su vida. Nadie es inferior ni superior a los demás. Cada persona destaca en unas cosas más que en otras.
  • Aceptarnos como somos y con todo lo valioso que tenemos como personas.

Todo esto nos motivará, nos hará sentirnos satisfechos con nosotros mismos, a encontrar fuerzas para seguir adelante, a superar dificultades…en definitiva y una vez más, a ser responsables y protagonistas de nuestra vida.

Poner límites

Los límites y su incidencia en lo laboral fue el tema que comentamos en Coaching para ti del programa enComunicación.

Recientemente he asistido a encuentros profesionales donde se reflexionó sobre la forma de relacionarnos y comunicarnos, además de hacia dónde podría dirigirse la sociedad del siglo XXI.

Pude comprobar que somos conscientes de los importantes retos y desafíos que encontramos en distintos ámbitos. Por eso, las palabras “límites” y “valores” estuvieron presentes en estos debates.

Por ejemplo, quiero destacar algunos de los muchos titulares de noticias como “Las denuncias por acoso laboral se disparan el 60% en 2015”, “Cómo detectar el maltrato psicológico”…..que reflejan duras y complejas realidades actuales.

¿Esto es nuevo? ¿es producto de nuestra sociedad? o ¿ha existido siempre?

Pienso que quizá el efecto amplificador de los medios y las redes sociales permite visualizar mejor un problema que siempre ha estado presente en las relaciones humanas.

Actualmente las circunstancias externas parecen potenciarlo aún más a consecuencia de la crisis económica y el aumento del desempleo.

A veces las normales exigencias de conseguir objetivos, aumentar la competitividad y mejorar el desempeño profesional, se desvirtúan y acaban en actitudes y expresiones ofensivas y de acoso psicológico.

Si nos fijamos en los casos de acoso, la falta de asertividad, el miedo a los demás y a las consecuencias o el poco amor propio hacen perder la confianza y el entusiasmo en la persona lo que permite el avance agresivo del acosador.

En este escenario, el dominio del pesimismo y la negatividad se hace patente. La persona entrega el “poder” sobre su vida a otro que considera superior por su posición jerárquica o su rol.

Surge entonces la disyuntiva entre cómo reaccionar para defenderse de estas agresiones y mantener la autoestima o resignarse por temor a perder la estabilidad laboral y económica.

En mi opinión, el miedo y la baja autoestima subyacen como algunos de los muchos factores comunes que se observan en estas situaciones.

De ahí la importancia de, ante el primer signo de falta de respeto o actitud agresiva, poner límites firmes marcando claramente nuestros derechos y espacio propio, diciendo NO a personas y situaciones que vulneran la consideración personal y profesional.

¿Cómo hacerlo?

  • Llamando a las cosas por su nombre, dejando la hipocresía y medias verdades que podamos decirnos para autoconvencernos sobre los hechos y las consecuencias
  • Aceptar las emociones que sentimos
  • Actuar con serenidad
  • Comunicar de forma adecuada con autenticidad, coherencia y respeto, pero sobre todo con firmeza.
  • Mantener un tono de voz neutro y calmado
  • Asumir las posibles reacciones contrarias de los demás sin perder de vista nuestra posición

En definitiva, por difícil que parezca, se trata de superar la situación de “víctima” y convertirnos en “protagonistas” de nuestra vida y nuestras circunstancias.

 

 

Establecer prioridades

Imagen de Splitshire
Imagen de Splitshire

En el programa enComunicación hablamos sobre la importancia de establecer prioridades.

A veces notamos en nuestra vida un cúmulo de exigencias y presiones que nos agobian y confunden sobre cuál sería el rumbo a seguir. Esto nos lleva a perder de vista los objetivos para nuestro desarrollo personal y profesional.

El tiempo es un recurso escaso, aunque a veces pensemos que es algo infinito y digamos “bueno, ya lo haré después, tengo tiempo aún..” Pero esto no es así. Por eso tenemos que cuidar mucho cómo gestionamos diariamente nuestro tiempo.

En nuestra vida existen tareas ordinarias, como las actividades cotidianas necesarias (comer, dormir, asearnos,….) y otras actividades que podríamos llamar “extraordinarias”, que son las que nos encaminan a los objetivos que queremos conseguir.

La mayor parte de nuestro tiempo y esfuerzos deben emplearse en lo que es más importante para nuestros objetivos y propósitos.

Si no establecemos prioridades, nos agotaremos por querer atender muchos frentes. Esto producirá malestar y, más tarde o más temprano, frustración.

Se trata de evitar:

  • la dispersión de ideas y de involucración en actividades que no aportan valor
  • la pérdida de tiempo y de energía. Lo que conocemos como “ladrones del tiempo”. Por ejemplo, una tarea tan sencilla como revisar nuestro correo o whatsapp 1 ó 2 veces máximo por la mañana y 1 vez por la tarde.
  • la falta de atención hacía uno mismo. Cuando queremos arreglar la vida de los demás sin tener resuelta la nuestra.
  • la falta de asertividad y de ausencia de límites.

En el camino aparecerán situaciones urgentes que deberemos atender, bien porque no hayamos sabido planificar y organizar adecuadamente nuestro tiempo y tareas, o bien porque  formarán parte del contexto en continuo cambio que nos encontraremos.

De ahí la importancia de marcarnos una hoja de ruta, una agenda diaria de actividades a cumplir para conseguir nuestros objetivos. Además, será de gran ayuda también para saber cómo utilizamos el tiempo y aprender a optimizar este recurso.

Establecer prioridades supone

  • tener claro qué queremos conseguir,
  • centrarnos en lo importante
  • tener el coraje para decir “no”
  • establecer límites claros y definidos
  • ordenar las diferentes circunstancias en torno a ese objetivo,
  • planificar las acciones necesarias y
  • emplear la energía y todos nuestros recursos para conseguirlo.

En definitiva, organizarse y establecer prioridades implica ordenar nuestra vida en todas sus dimensiones para trabajar, descansar y disfrutar de nuestro tiempo.

 

Hoja de ruta para conseguir nuestros objetivos

Imagen de Heidi Sandstrom
Imagen de Heidi Sandstrom

Inauguramos el primer programa del año de enComunicacion hablando sobre la hoja de ruta para conseguir nuestros objetivos.

Es muy habitual a comienzos de cada año tomarnos un tiempo para plantearnos algunos objetivos en nuestra salud, trabajo, ingresos,….etc.

A veces hacer realidad algunas de estas buenas intenciones no supera las primeras semanas del año. Las olvidamos con la rutina diaria, las posponemos para otro momento o simplemente nos parecen muy difíciles de poner en marcha.

Sentimos que el camino a veces es sinuoso, tiene retrocesos. Otras veces aparecen fuertes “tormentas” que no nos permiten avanzar como hubiéramos querido. Estos y muchos más obstáculos –internos y externos- estarán muy presentes. Los tendremos que tener en cuenta para poner todo el empeño, esfuerzo y coraje del que seamos capaces para llegar a destino.

¿Cómo podemos superar estas dificultades?

La hoja de ruta a seguir sería dar estos siete pasos.

1.- Decidir empezar

Es esencial dar el primer paso. A veces no sabemos muy bien cómo llevar a cabo un objetivo. Si nos empeñamos y vamos a ello, siempre encontraremos la manera y los caminos para hacerlo realidad.

2.- Dividirlo en etapas fáciles de realizar.

No vamos a conseguir nuestro objetivo de manera inmediata. Llevará tiempo. Se trata de hacer un plan con pasos razonables y claramente definidos.

3.- Eliminar las distracciones

Encontraremos excusas y justificaciones para no hacer lo que nos hemos propuesto o dejarlo para otro momento. Será importante reconocer esas distracciones para eliminarlas del camino. Con persistencia y decisión podremos volver a nuestra ruta.

4.- Definir y reservar tiempo concreto

Determinar un plazo de cumplimiento específico para cada etapa de nuestro plan de acción.

5.- Hacernos responsables de nuestros planes

Revisaremos lo que hacemos y anotaremos cuando lo terminamos para saber si cumplimos el margen de tiempo que hemos planificado.

6.- Reconocer las etapas alcanzadas y celebrarlas

A medida que vayamos alcanzando etapas, será muy positivo celebrar lo que hemos conseguido hasta el momento.

Cuando superamos los obstáculos internos y externos, encontraremos la motivación y la máxima ilusión para continuar avanzando y llegar a la meta.

7.- Aceptar el esfuerzo para conseguir los objetivos

Cuando queremos conseguir algo, el esfuerzo puede ser intenso, incluso duro en algunas ocasiones. De ahí que la fuerza de voluntad sea nuestra constante compañera.

 

Si verdaderamente queremos crecer, personal y profesionalmente, necesitamos establecer unos buenos y adecuados objetivos y ser conscientes del camino que debemos recorrer con fuerza de voluntad para alcanzarlos.

 

Vivir la vida

Vivir la vida, este gran tesoro que todos tenemos. De esto hablé en Coaching para ti  dentro del programa enComunicación.

En la última sesión del año a punto de finalizar compartí con los oyentes una historia de vida.

“Una joven profesional con mucho éxito vivía muy entusiasmada con su actividad. Sabía que su trabajo le daba una gran proyección a la imagen de la empresa y también a ella misma. Su excelente labor era reconocida por todos….tanto es así que le daban cada vez más  responsabilidades que inicialmente no estaban previstas para su cargo.

Ella estaba feliz por lo que suponía su trabajo, mientras seguía recibiendo más y más responsabilidades. Su sueldo se mantenía casi igual y también el número de personas en su equipo.

Con todo esto, la vida de esta joven profesional estaba prácticamente ocupada por el trabajo.

Hasta que este esfuerzo desmedido con un estrés muy intenso le provocó fuertes dolores de cabeza. Su salud empeoró y un día acabó en el servicio de urgencias de un gran hospital.

Allí se encontró con episodios de dolor, situaciones muy difíciles de asimilar para una persona tan llena de vida como ella.

Esas imágenes tan fuertes la llevaron a preguntarse cómo había llegado a este punto sin tener apenas energía para levantarse.

En medio de tantas angustias y sufrimiento ajeno, tuvo la fortuna de encontrar una luz esperanzadora. La neuróloga que la trató, le habló con mucha calidez humana dándole esta receta: “Eres joven, con mucha vida por delante, no la malgastes así. VIVE plenamente tu vida”

El consejo de esa doctora es fácil de entender para todos nosotros ¿verdad?

Si esto es tan evidente, ¿por qué tantas personas -y no sólo la joven de nuestra historia- están tan perdidas en la vida y malgastan su tiempo y su salud?

El tiempo que nos toque vivir hay que disfrutarlo, de la mejor manera, independientemente de que las cosas nos salgan bien o mal. Siempre hay que animarse a vivir cada día en plenitud y encontrar un sano equilibrio entre nuestras obligaciones, nuestros afectos y aspiraciones.

En estos tiempos de finales e inicios del año reflexionamos sobre lo pasado y  planteamos muy buenos propósitos. Nos deseamos felicidad, salud, prosperidad, amor, ….!!todo lo mejor!!

Ahora bien, miremos en nuestro interior y pensemos ¿cuánto estamos dispuestos a poner de nuestra parte para hacer que esos deseos se conviertan en algo real? ¿Que esos propósitos se concreten y nos ayuden a vivir una vida plena?

Algún día llegará el final de nuestra vida.

¿Qué reflexión haremos sobre lo que ha sido nuestra vida?

Realmente la vida es un gran tesoro que dura poco tiempo y donde surgen todo tipo de opciones. La primera y esencial, que no podemos dejar de lado, es precisamente “VIVIR LA VIDA”….Este es el camino que espero que cada uno encuentre en su paso por este mundo.

¡!Feliz 2017 lleno de VIDA!!

 

El declive abre paso a un nuevo ciclo

Imagen de Jack Moreh
Imagen de Jack Moreh

Dentro de la sección Coaching para ti del programa enComunicación compartí con los oyentes mis reflexiones personales sobre los acontecimientos que estamos presenciando a nivel global desde hace un tiempo.

Vivimos inmersos en un proceso mundial de cambios: los avances de la tecnología y sus consecuencias en la vida diaria y en el empleo; la explosión del Big Data; la transformación digital; la falta de credibilidad de las instituciones públicas y políticas; la creciente desigualdad social; los ingentes beneficios de las multinacionales en contraste con los despidos masivos de trabajadores;  el avance de los populismos; el desprestigio generalizado de la educación y la cultura frente a la proliferación de lo banal y lo fácil….

Por todo esto creo que estamos en el momento adecuado para hacer un profundo análisis sobre cómo queremos que sea nuestra futura vida en sociedad,  en qué mundo queremos vivir, qué dejaremos a las generaciones que nos sigan…

El caos, la confusión, la desilusión y el hastío son síntomas de finales de ciclo. Y parece que éste es uno de ellos.

Precisamente, en estos momentos es donde más necesitamos pensar antes de reaccionar, analizar pros y contras de las consecuencias de nuestras acciones para evitar caer en situaciones que nos perjudicarán aún más a todos.

Los resultados del referéndum del Brexit, el No al proceso de paz en Colombia, las recientes elecciones en EEUU y más hechos que han sucedido … me llevan a pensar que muchas veces, más de las necesarias, nos movemos visceralmente.

En este contexto de polarización el declive se acentúa cada día más. Ante esto no conviene adormecernos y pensar que ya pasará o que otros lo arreglarán.

Somos responsables de lo que suceda, no podemos mirar a otro lado. Esa pasividad sólo contribuirá a dar paso a personas y/o corrientes de ideas que se adueñarán de la situación y la conducirán a su conveniencia. Algo podríamos hacer y, sin duda, ¡!tenemos que hacer!!

La Historia es una fuente inagotable de lecciones. Ahora más que nunca conviene que miremos y aprendamos del pasado, de lo que las generaciones anteriores ya sufrieron y vivieron.

Esto nos hará ser conscientes de nuestro protagonismo y responsabilidad, así como la necesidad de participar en el cambio para definir y construir el nuevo ciclo que viviremos en común.

Está claro que la Humanidad ha hecho grandes cambios y que somos capaces de superar situaciones completamente adversas. …Ahora la Historia nos pone a prueba y es nuestro momento para demostrarlo.

¿Cómo definimos nuestros objetivos?

pixabay
Imagen de Pixabay

Seguimos avanzando en la sexta temporada de enComunicación y en la sección de Coaching para ti hemos hablado de cómo definir los objetivos de manera muy concreta desde la perspectiva de coaching.

Lo primero que tenemos que distinguir es qué queremos conseguir a medio o largo plazo. Se trata del objetivo final.

Por otro lado, tendremos que considerar qué objetivos a corto plazo o escalones subiremos para llegar a la meta.

El compromiso con este tipo de objetivos es mucho más fácil puesto que son situaciones más próximas a nuestro control y responsabilidad.

Esto no siempre sucede con el objetivo final. A veces no depende sólo de nosotros mismos, por más que nos esforcemos, sino de otras personas y/o circunstancias que pueden influir en los resultados.

¿Cómo lo vamos a hacer?

Lo primero se trata de saber el objetivo que la persona desea lograr y preguntaremos “¿Qué quieres conseguir en esta sesión?” para enfocar desde el primer momento el objetivo a corto plazo.

Es normal escuchar respuestas como: “encontrar pautas para hablar en público”, “organizar el plan de trabajo”, “sentir tranquilidad”…

Parecería sencillo, pero en muchas ocasiones no es fácil definir los objetivos con claridad, de forma concreta y en plazos de cumplimiento. Será necesario acudir a la referencia del célebre acrónimo SMART para concretar los objetivos de manera específica, medible, alcanzable, realista y oportuna.

Para hacernos una idea concreta de este proceso comparto un ejemplo extraído del libro “Coaching” de John Whitmore.

Joe, un director de cuentas en una agencia de publicidad, tiene problemas  para adelgazar. Empezó a hacer ejercicio, pero se aburrió y buscó excusas. Poco tiempo después, tuvo lugar esta conversación de coaching:

Mike: Muy bien, Joe, ¿qué esperas de esta media hora?

Joe: Haberme fijado un plan para ponerme en forma

Mike: Vamos a pensar a largo plazo. ¿Por qué quieres ponerte en forma?

Joe: Me siento mal conmigo mismo y el trabajo se está resintiendo

Mike: De acuerdo, ¿qué cambio quieres lograr y en cuánto tiempo?

Joe: Me gustaría perder unos 7 kilos y en unos meses ser capaz no sólo de subir las escaleras y correr hacia el tren sin ahogarme, sino de disfrutar de salir a correr.

Mike: ¿Qué peso quieres alcanzar y para cuándo?

Joe: Quiero pesar 95 kilos a finales del verano. Eso supone adelgazar unos 7 kilos.

Mike: Podrías lograrlo dejando de comer, pero no estarías más en forma ¿Cómo mediremos la forma física?

Joe: Correré 32 kilómetros a la semana desde comienzos de septiembre

Mike: ¿A alguna velocidad concreta?

Joe: No, me basta con ser capaz de hacerlo. Sabré que lo estoy haciendo bien

Mike: Me da igual la velocidad que te marques, pero has de fijarte una.

Joe: De acuerdo, 6 minutos por kilómetro.

En este caso presentado por Whitmore, vemos cómo se ha delimitado un objetivo para la sesión –fijar un plan para ponerse en forma-, un objetivo a largo plazo –adelgazar 7 kilos– y un objetivo intermedio – correr 32 kilómetros a la semana a un promedio de 6 minutos por kilómetro-. Se trata de objetivos específicos, medibles, realistas y alcanzables, con plena responsabilidad sobre sus metas.

Esta es una situación muy concreta, por supuesto. En ocasiones, las situaciones están menos definidas y confusas porque se relacionan con el significado y el propósito de la vida.

En estos casos, tendremos que ir dando pasos con preguntas como:

“¿Cómo quieres que sea tu situación laboral en un año?”

“¿Cómo definirías de forma detallada esa situación que quieres conseguir en el trabajo?”

¡¿Qué es lo que te mueve a trabajar?”

“Si tu trabajo actual está muy lejos de lo que quisieras, ¿qué podrías hacer para cambiar la situación?”

Así habremos especificado nuestros objetivos de forma más clara y concreta para continuar con las siguientes fases del proceso de coaching.

 

¿Cómo quieres que sea tu vida?

Imagen de Alice Achterhof
Imagen de Alice Achterhof

En la cita habitual de la sección de Coaching para ti  del programa enComunicación hemos continuado el trabajo iniciado con el autodiagnóstico de nuestra rueda de la vida.

Quizá algunas personas que han hecho ya  este ejercicio habrán valorado su vida de forma positiva y equilibrada, en líneas generales.  Les doy la enhorabuena y les impulso a seguir en con esa actitud vital.

Puede que otras hayan detectado situaciones que pudieran haber pasado inadvertidas hasta el momento, pero que pueden reconducir fácilmente.

Es posible también que algunas personas hayan detectado áreas no cubiertas en su vida u otras que están tan llenas o tan vacías que “contaminan” algunos aspectos del resto de su vida.

Se trata, por ejemplo, de casos donde el trabajo es tan absorbente que afecta la salud, la vida en pareja, la familia, las amistades, el ocio… Otros donde la dedicación a la familia ocupa tanto tiempo que no se puede hacer nada para el desarrollo personal y el ocio… Otros casos donde la salud no es buena y no se puede disfrutar de todo lo demás…

Este tipo de situaciones son precisamente las que se pueden trabajar en los procesos de coaching, a excepción de aquellas circunstancias que escapen de lo que con esta técnica pueda alcanzarse.  Es importante recordar que el coaching no es una terapia.

¡!Y nos ponemos manos a la obra!!

Por ejemplo, en el aspecto “trabajo”, tema que a muchas personas les interesará y a las que  pregunto:

¿Qué situación estás viviendo en tu lugar de trabajo?

¿Qué hechos han ocurrido o están ocurriendo para estar insatisfecho/a?

Los “hechos” son situaciones observables y objetivas para todo el mundo, no se trata de opiniones.  Ej: la jornada empieza a las 9 de la mañana y termina a las 8 de la tarde; o hay cuatro reuniones al día; o, varias personas están haciendo el mismo trabajo…

¿Qué opinión tienes de lo que está sucediendo?

Analizamos ahora tus pensamientos… ¿Qué te dices cuando ves o sabes de estos hechos? ¿qué diálogo interior tienes en tu cabeza?

¿Qué sientes?

Pregunto por las emociones que generan esos pensamientos y ese diálogo interior ¿cómo es el malestar que sientes? ¿de qué manera lo describirías?

¿Qué quieres cambiar? ¿Cómo sería el trabajo ideal para tí en esa organización o en otra?

Se busca reflexionar sobre aquello que te gustaría que fuera, tus deseos de una realidad mejor. En este punto hablamos de sólo deseos. No son objetivos, éstos vendrán más adelante.

¿Qué está en tu mano cambiar, qué depende de tí? ¿Qué depende de los demás?

En definitiva se trata de adoptar un papel activo en tu vida, no estar a expensas de los demás, no ser “víctima” de los demás, sino protagonista de tu vida.

Adquirir conciencia de lo que está en tu mano hacer y de aquello sobre lo que no puedes hacer porque está en manos de otros. Aceptar esa realidad.

Desde esa aceptación, ahora sí, podrás definir tu objetivo y el diseño de esa vida mejor que quieres y… dibujarás otra Rueda de la Vida, la que tú quieres que sea con la puntuación nueva y satisfactoria que le darás para sentirte una persona feliz y equilibrada!!!

 

La rueda de la vida

rueda1

 

En la sección de Coaching para ti del programa enComunicación hablamos sobre cómo hacer un autodiagnóstico de la vida de cada uno a través de un ejercicio gráfico –la rueda de la vida– muy utilizado en coaching.

Se trata de reflexionar sobre lo qué es la vida actual de la persona, de cuántas facetas se compone y qué grado de satisfacción tiene sobre cada una de esas áreas.

¿Cómo lo vamos a hacer?

Primero tenemos que destinar un tiempo y un espacio para nosotros con tranquilidad, donde nada ni nadie nos interrumpa. Si nos sentimos cómodos, podemos escuchar también algo de música suave y relajante. Se trata de estar con la máxima concentración en el ejercicio.

Tendremos folios en blanco, lápices, bolígrafos, pinturas de colores,…

Y dibujaremos una amplia circunferencia, como si fuera la rueda de una bicicleta.

Habrá que dividirla en doce sectores simétricos, como aparece en la imagen superior de este post. Puede dividirse en menos áreas, pero se trata de saber cómo está de llena o menos llena nuestra vida en algunos aspectos.

Cada sector representará una faceta de nuestra vida, cuyo orden y colocación en la circunferencia lo decidirá cada persona:

  • Salud
  • Hogar
  • Dinero
  • Pareja / amor
  • Familia
  • Amistades
  • Desarrollo profesional
  • Ocio
  • Crecimiento personal
  • Automotivación
  • Iniciativa
  • Análisis y solución de problemas

Dentro de la circunferencia dibujaremos nueve círculos concéntricos a los que daremos números justo en el corte de los radios (líneas de división) siendo  1 el centro de la circunferencia y  10 el borde final de la misma.

Y ahora se trata de evaluar – de 1 a 10- cómo es nuestra vida respecto a los sectores en que hemos dividido nuestra rueda: Salud, Hogar, Dinero… una a una todas las áreas.

Y esa valoración la marcaremos con puntos donde se cruce el radio (la línea de cada sector) con el círculo interior, el de la numeración.

Para finalizar el ejercicio trazamos una línea que una punto a punto  (el de cada sector) en nuestra rueda. (ver imagen de la izquierda)

También podemos pintar de colores distintos cada sector hasta la puntuación que hemos puesto (ver imagen  de la derecha)

rueda4

Ahí obtendremos una figura asimétrica, con picos y valles más o menos pronunciados en algunos aspectos.

Viendo esta figura y sabiendo qué puntuación tiene cada sector de nuestra vida,  podremos reflexionar sobre:

  • ¿de cuántas facetas se compone mi vida?
  • ¿en qué aspecto hay déficit?
  • ¿de qué me siento satisfecho?
  • ¿qué aspecto debería cambiar porque no me encuentro bien?
  • ¿tengo una vida equilibrada?

A raíz de este resultado y lo que consideremos a partir de estas reflexiones, será momento de iniciar otra fase en nuestro proceso de coaching que… describiré más adelante.

¿Te animas a dibujar tu rueda de la vida?

 

Coaching para ti en la 6ª temporada del programa enComunicación

Imagen de Lizzie Guilbert
Imagen de Lizzie Guilbert

Ya ha comenzado una nueva temporada para el programa enComunicación que se emite en EsRadio Valencia FM todos los jueves de 19.00 a 20.00 horas.

En este inicio también presentamos lo que serán algunos de los contenidos de la sección Coaching para ti

Hablaremos de situaciones del proceso de coaching, cómo se realiza, qué fases se siguen,…

 

  • El éxito, ¿qué es para cada persona y organización? ¿en qué medida cada uno definiría el éxito en lo que quiere conseguir?
  • Punto de inicio, ¿dónde estamos? ¿en qué momento y situación concreta? ¿Cómo podemos hacer un diagnóstico de nuestro presente?
  • Resultados, ¿qué queremos? ¿cómo lo concretamos específicamente? ¿cómo podremos saber si hemos conseguido lo que nos proponemos?
  • Hoja de ruta: ¿cuál va a ser nuestro recorrido hacia el objetivo? ¿cómo planificamos cada etapa? ¿qué habrá que tener en cuenta?
  • El camino…!!empieza lo bueno!!
  • Las dificultades: estarán presentes sí o sí. Algunas podremos tenerlas en cuenta, otras vendrán solas…¿qué hacer? ¿qué “monstruos” aparecerán en el “camino del héroe”?
  • Las habilidades: están en nuestro equipaje de viaje y algunas las iremos consiguiendo en el propio camino. ¿Qué ayudas tendremos? ¿Qué aparecerá o qué buscaremos para seguir adelante y conseguir nuestros objetivos?

 Habrá preguntas para la reflexión y noticias de actualidad en el ámbito coaching.

¡!De todo esto y mucho más hablaremos en esta 6ª temporada de enComunicación!!